Se trata de Fodda Assad Robledo, bioquímica y farmacéutica recibida en la Universidad Nacional de La Rioja, quien el pasado miércoles, 4 de diciembre, rindió su trabajo final. Además de lograr dicha especialización, la profesional es una de las tres primeras bioquímicas graduadas en 2007 en la Casa de Altos Estudios.
La flamante graduada defendió su tesis denominada “Determinación de la Producción de Extrapolisacáridos y del Espectro Antimicrobiano de Bacterias Provenientes de Residuos Olivícolas", correspondiente a la Especialización en Bioquímica Clínica-Área Microbiología Clínica primera cohorte.
El trabajo final estuvo dirigido por la magister y bióloga María Alejandra Soloaga. En tanto el tribunal examinador del trabajo estuvo a cargo del Dr. Hernán Rojas, la farmacéutica Gabriela Martín y la bioquímica María José Cabral.
En la oportunidad, Assad Robledo -quien es docente de la cátedra de Bacteriología en la UNLaR- indicó que el cursado de la especialización duró 24 meses y dos años más para poder realizar el trabajo final que fue financiado por el Consejo de Investigación Científicas y Tecnológicas (CICyT) como proyecto de investigación.
“Venía participando de varios proyectos de investigación, pero gracias a la investigación de este trabajo pude ingresar como directora ejecutiva, lo que significó un avance muy importante. También es de destacar la predisposición del departamento de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales el haberme facilitado las instalaciones y los equipos para poder llevar a cabo este trabajo en el laboratorio de microbiología general, como así también agradecer al doctor Carlos Laino, al equipo de laboratorio y a la regente de posgrado Claudia Romero,” expresó Assad Robledo.
En cuanto a la temática de la investigación presentada, la profesional indicó que se basa en el trabajo de residuos de la producción de aceite de oliva. “Como todos sabemos, La Rioja es una de las principales productoras de aceite de oliva y este proceso de producción genera diferentes residuos que son tóxicos para el medio ambiente”.
“Es por ello que se trabajó con estrategias para reutilizar estos residuos ya que existen bacterias que son autóctonas de estos residuos y producen polímeros lo cual nos llevó a realizar esta investigación y aplicaciones en la biorremediación”.
Robledo indicó que se pudo avanzar, estudiar por un lado la inocuidad de las cepas y se pudo determinar que son productoras de los polímeros.
Los polímeros se definen como macromoléculas compuestas por una o varias unidades químicas que repiten a lo largo de toda una cadena en tanto la biorremediación se llama al proceso que utiliza microorganismos, hongos, plantas o las enzimas derivadas de ellos para retornar a un medio ambiente alterado por contaminantes a su condición natural.
Por último, la flamante graduada señaló que, en una futura investigación, con los resultados que se obtuvieron a partir del trabajo realizado, quedaron varias líneas de acción para seguir abordando como caracterizar más a los polímeros y ver qué aplicaciones, a nivel biomedicinal, pueden llegar a tener, determinar si los polímeros tienen actividad anticoagulante. Para ello, se conocerá previamente la composición físico-química de los polímeros y trabajar con procesos y medios de cultivo para llegar a la máxima producción de las bacterias para inducir la producción de los polímeros.