Esta jornada quedará marcada como una nueva fecha histórica para la comunidad educativa. Al igual que en distintos puntos del país, una multitud marchó en defensa de la universidad pública, gratuita, inclusiva y de calidad. Se estima que por las calles de la ciudad de La Rioja se movilizaron cerca de 7 mil personas.

La Universidad Nacional de La Rioja también se puso de pie. En la tarde de este jueves, el colectivo representado por estudiantes, docentes, nodocentes, graduados; acompañados por integrantes de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), profesorados de la Capital, miembros de sedes académicas del interior, gremios y comunidad en general, dieron inicio a la marcha desde las puertas de la Casa de Altos Estudios, con dirección a la Plaza 25 de Mayo.  

A lo largo del recorrido, con una marcha que colmaba una extensión de aproximadamente cuatro cuadras; entre cánticos y carteles con diferentes frases, repudiaron el desfinanciamiento que está sufriendo el sistema universitario, que impide que 57 universidades retomen el dictado de clases, correspondiente al segundo cuatrimestre.

A medida que avanzaba la movilización, en diálogo con Radio UNLaR 90.9, la secretaria general de ATUR, Alicia Luna, expresaba su sorpresa ante el masivo acompañamiento de la comunidad riojana. "Esto deja en claro que la Educación Pública no se toca”, señaló.

En el mismo sentido, Gustavo de La Fuente, secretario de Asuntos Estudiantiles, dijo: “lo que pasó hoy es una gran satisfacción, no sólo para el estamento estudiantil, sino para toda nuestra universidad”. Asimismo, el titular de la Asociación de Maestros y Profesores de la Rioja, Rogelio de Leonardi, remarcó que esta movilización “es una de las más importantes de la historia de La Rioja”.

Finalmente, una vez que la multitud se concentró en la Plaza principal del distrito capital, se procedió a la lectura de documentos por parte de referentes de los distintos estamentos y gremios de la UNLaR, reforzando el plan de lucha que se manifiesta principalmente, en contra del desfinanciamiento universitario que impide el funcionamiento correcto de las Universidades Nacionales.