Mónica Capettini es la nueva responsable de la dirección de la institución; mientras que Marcelo Cortez es el flamante vicedirector.
Mónica Capettini asumió en lugar del ex director, Roberto Contreras, quien pasó a ser autoridad del Instituto Superior de Formación Docente y Técnica en Arte y Comunicación "Profesor Alberto Mario Crulcich". Asimismo, el vicedirector ocupará el lugar de Capettini, quien se desempeñó como vicedirectora desde el año 2015.
Al respecto, el rector de la Universidad Nacional de La Rioja, Fabián Calderón, remarcó la importancia de la institución, dada la vinculación directa que tiene con la Casa de Altos Estudios: “estamos convencidos que más allá de las personas, lo importante es consolidar un proyecto de universidades públicas, en donde cada una de las áreas académicas que tiene el colegio se enmarquen dentro de la visión de una universidad pública y gratuita, que genere inclusión y oportunidades”. “Un proyecto de colegio preuniversitario, tiene que ver con miradas de profesionalización, pero por sobre todo, tiene que formularse pensando en la realidad de nuestros jóvenes que asisten al colegio, entendiendo la realidad social, cultural, económica y familiar”.
Seguidamente, la flamante Directora anunció algunos de los objetivos y proyectos que pretende desarrollar a lo largo de este nuevo desafío: “me comprometo a escuchar y construir colectivamente; todos van a ser parte de esta construcción. La institución escolar, desde hace muchos años, va en resonancia y consonancia con las situaciones sociales, la escuela ya es una institución de servicios, en la que permanentemente se funden los límites que tienen que ver con lo social, familiar y particular”. Asimismo, se refirió a la importancia de las instituciones escolares en la formación de las personas: “la escuela, además de formar, tiene que contener. Estamos comprometidos a contener a esos estudiantes que, en algunos casos, no están en situaciones óptimas, hay que cobijarlos, darle la oportunidad para que puedan trazar sus propios pasos. Hay que fortalecer cuestiones que impactan en el aula, porque el aula es el espacio sagrado en donde se construye el conocimiento”.
Por último, Cortez comentó sus expectativas acerca de este nuevo rol que le toca desempeñar dentro de la institución escolar: “Me comprometo a trabajar, es un trabajo colectivo, es una responsabilidad de todos hacer que el colegio sea cada vez mejor. Las puertas están abiertas para sugerencias, dudas, proyectos, problemas e ideas para trabajarlas en conjunto y llevarlas adelante con el fin de que el colegio siga creciendo”.